Volvemos a rescatar una actividad hecha hace bastante tiempo: conducir un Buggie.
¿Dónde realizamos la actividad?, en Dubai!. Más arena que allí, díficil. Lo bueno es que el recorrido lo hicimos en pleno destierto, no en un trozo de arena de las afueras, sino que vinieron a buscarnos y tardamos casi 1 hora por carreteras cada vez más estrechas y llenas de arena hasta llegar a la zona de partida.
Allí, empezó la caravana, un buggie delante para mostrarnos la ruta (sino a saber dónde acabamos en medio de la nada....hacia ...quien sabe dónde) y nosotros detrás siguiéndo cómo podíamos.
El recorrido fue hasta un punto en medio del desierto, y luego vuelta. A la idea, ibámos con más miedo, por momentos el coche se ponía de lado totalmente o inclinado del todo bien hacia abajo o hacia arriba y daba la sensación que en cualquier momento acabaríamos dando vueltas rebozados en arena..pero no!. La vuelta la hicimos con más confianza, viendo la estabilidad del vehículo y fue una experiencia espectacular, estar surcando dunas en medio de la nada...
Estamos deseando volver a otro país con un desierto así y repetir la experiencia!.
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